231 pasajeros que abordaron el vuelo de Avianca que cubría la ruta Madrid – Medellín se llevaron un buen susto al poco tiempo de haber despegado el domingo 7 de julio.
Algunos pasajeros aseguran que una de las ventanas de cabina se fisuró, pero Avianca informó que no hubo ruptura. No obstante, por seguridad, los pilotos decidieron regresar al aeropuerto de Madrid.
Los protocolos para este tipo de situaciones indican, además, que es necesario liberar el peso del avión descargando combustible en el aire.
Un reporte publicado en la cuenta de X de los Controladores Aéreos de España dice: “Realizan un descenso inicial a 12.000 pies y varias esperas para reducir peso. Una vez listos para aproximación, les recortamos en lo posible con prioridad mientras se activan los servicios de emergencia del aeropuerto. Aterriza y libra pista sin incidencias”
La tripulación del vuelo saliendo de #Madrid hacia Medellín nos comunica que tienen un posible problema con una ventanilla de cabina y que prefieren regresar a Madrid. Realizan un descenso inicial a 12.000 pies y varias esperas para reducir peso. Una vez listos para aproximación,… pic.twitter.com/4LAxPcyUM3
— 😉Controladores Aéreos 🇪🇸 (@controladores) July 7, 2024
Desde Avianca explicaron que el vuelo aterrizó de regreso en Madrid a las 7 de la noche, hora local, y sin contratiempos.
Los pasajeros fueron atendidos por equipo en tierra para asistirlos con alojamiento, en tanto que los iban ubicando en otros vuelos de la compañía.
Aunque no hubo heridos en la emergencia, uno de los pasajeros le dijo al diario El Colombiano que: “Se perdió algo de estabilidad, lo que generó pánico entre los ocupantes de la aeronave”. En algún momento se vieron forzados a colocarse en posición fetal por seguridad, lo que implicó unos 20 minutos de bastante susto.